“La Shoá es parte del pasado reciente porque todavía existen voces que la pueden testimoniar”

01/Dic/2010

Óscar Destouet, ex responsable de las Políticas de Memoria del Ministerio de Educación y Cultura, aseveró que el líder iraní Mahmoud Ahmadinejad niega el pasado de la Shoá para justificar el presente “represivo” hacia su pueblo

“La Shoá es parte del pasado reciente porque todavía existen voces que la pueden testimoniar”

Por Martín Kalenberg

Cada vez que pronuncia el término Shoá (cataclismo destructivo) se nota en su cara el dolor de aquél que se identifica con el sufrimiento ajeno. Representa a la perfección la forma de llevar a la práctica el mandamiento bíblico de “no te quedarás parado ante la sangre de tu hermano”. El profesor de Historia y ex responsable de las Políticas de Memoria del Ministerio de Educación y Cultura, Óscar Destouet, no es judío, pero siente el exterminio nazi de 6.000.000 de judíos como propio. Así lo hizo saber a las autoridades nacionales cuando propuso, durante el gobierno del presidente Tabaré Vázquez (2005-2010), que Uruguay se integrara a un organismo internacional, auspiciado por Naciones Unidas, que busca mantener vigente el recuerdo de la Shoá.

Hace casi dos años viajó a un seminario sobre la Shoá que se realizó en el museo del Holocausto en Yad Vashem (Jerusalén). Para Destouet fue una experiencia única de aprendizaje, vivencias y contacto humano con otros latinoamericanos que, como él, luchan para que el recuerdo y la memoria sigan vivos.

A continuación el resumen de la conversación que el portal web del CCIU mantuvo con Destouet:

– ¿Qué es la Task Force para la educación, el recuerdo y la investigación de la Shoá?

– La Task Force (fuerza conjunta) es una organización internacional de estados y organizaciones de la sociedad civil de carácter mundial, por lo cual conviven lo público y lo privado; esta modalidad, relativamente nueva, reúne en el caso de la Shoá a aquellas instituciones y estados que incentiven la investigación, la educación y el homenaje a las víctimas; Argentina es el único país latinoamericano que es miembro pleno de la organización integrada, además, por 27 países del resto del mundo.

– ¿Y Uruguay?

– A iniciativa de la Dirección de Derechos Humanos del Ministerio de Educación y Cultura elevamos, a consideración de las autoridades nacionales, la integración a la Task Force, porque nos parecía una obligación como sociedad uruguaya el recordar y homenajear a las víctimas y tener una memoria ejemplar de los actos de heroísmo, de las solidaridades, y del reconocimiento de lo inhumano de los humanos y como a partir de ese reconocimiento podemos aportar.

La Shoá no es sólo judía sino de toda la humanidad; les pasó a todos los seres humanos en cuanto a la consideración de la condición humana y a lo que se puede llegar; así como el Apartheid no es un tema de negros sino que le concierne a todo ser humano.

– ¿Cómo se vinculó a la Shoá?

– En primer lugar, como ciudadano sensible a las temáticas de la discriminación y de la vigencia de los derechos humanos; los temas de la memoria de lo que sucedió en nuestro país durante el período del terrorismo de Estado nos hacen, a quienes lo vivimos, más fácil la comprensión de otros asuntos vinculados a la persecución y discriminación a otros ciudadanos; y también te hace -en ese aprendizaje- ser más sensible.

– ¿Por qué la considera como parte del pasado reciente?

– La Shoá es parte del pasado reciente porque todavía existen voces vivas que la puedan testimoniar y contar; las Leyes de Nuremberg, que en setiembre de este año cumplieron 75 años de su promulgación en Alemania, institucionalizaron la discriminación y persecución a los judíos. Hay un autor que dice que después de 100 años empieza el olvido ya que no hay generaciones que recuerden la voz de los protagonistas, a pesar de que la tecnología nos acerca y las distancias se hacen más cortas a las de otras épocas.

– En la educación nacional, ¿se profundiza sobre la Shoá?

– La enseñanza uruguaya tiene algunas particularidades que hacen a una tradición de libertad de cátedra muy fuerte en nuestro cuerpo docente. Podemos integrar a la Shoá dentro de la temática de la Segunda Guerra Mundial aunque no es enteramente correcto; si bien temporalmente ocurrió en el mismo período de tiempo comenzó con las Leyes de Nuremberg en 1935, mientras que el conflicto bélico empezó en setiembre de 1939.

-¿Cómo interpreta la comparación que algunas personalidades públicas hacen entre el gobierno israelí y el nazismo?

– Lo legítimo es la crítica a cualquier gobierno. Desde 1947 hasta ahora Israel ha tenido gobiernos diferentes: los de derecha y los más progresistas. Ahora, cuando dicen: “ustedes son unos nazis”, entran en un juego perverso que intenta herir la sensibilidad del israelí y del judío. En cualquier conflicto hay una perversa ambición humana de intentar herirte donde te duele. Lo que también existe es el negacionismo de lo sucedido, porque hay presentes de negación que no sólo niegan la historia sino que también el presente de libertad en sus países como es el caso del (líder) iraní Ahmadinejad. El negar determinados pasados justifica un presente represivo hacia su propia gente.

– ¿Qué recuerda del curso al que asistió en Yad Vashem?

– El curso de Yad Vashem de enero de 2009 contó con la participación de quince latinos de distintos países, excelentes compañeros con los cuales mantenemos un intercambio virtual y presencial. El nuevo museo es impactante desde distintos lugares: por ejemplo, la utilización simbólica de la arquitectura y determinados elementos de la geografía para transmitir valores y enseñanzas; uno ingresa y empieza a recrear la vida de comunidades judías en distintos lugares de Europa a través de distintos videos; uno va metiéndose en la entrañas de la tierra llegando a su punto más bajo con los campos de exterminio y de concentración y va “saliendo” con el levantamiento del Gueto de Varsovia y otras rebeliones y finaliza en una balconada donde hay una hermosísima vista de plantas y árboles de Jerusalén que hacen retomar el sentido de la vida. También estuvimos dos días en el kibutz (granja colectiva) Lojamei Hagetaot (Combatientes de los Guetos) que presenta la resistencia judía que se crea a partir de sobrevivientes del gueto de Varsovia.